A la hora de conducir, una correcta visibilidad es vital para poder circular seguro. Hay situaciones donde nos encontraremos con una visibilidad reducida y las maniobras se convertirán en complicadas lo que nos llevará a extremar las precauciones.
Como conductores creemos que tenemos mucha experiencia y que evitaremos cualquier riesgo sin problema pero en el caso del punto muerto es algo que difícilmente podemos controlar. Sumémosle que en los viajes largos, por lo general, nos relajamos y con el paso de los kilómetros podemos llegar a descuidar las precauciones. Es entonces cuando ponemos en riesgo la seguridad y el prestar atención en especial a los puntos muertos se hace vital. Te damos para ello algunos consejos:
– Retrovisores. Es inevitable a veces colocarlos de tal manera que visualicemos el lateral del vehículo pero con ello podemos estar creando un ángulo muerto ya que hay zonas que no se reflejarán. Lo idóneo es ajustarlos de tal manera que solo intuyamos el flanco del coche porque…¿para qué necesitas ver las puertas de tu coche mientras conduces?
– Espejos. Está bien que los tengas en cuenta y hagas uso de ellos pero no te limites solo a esto. Por muy bien colocados que los dejemos, habrá siempre un pequeño ángulo muerto con lo que a la hora de cambiar de carril: gira siempre la cabeza para cerciorarte de que todo está correcto y puedes adelantar.
– Posición en el coche. La postura de nuestro cuerpo conduciendo también es importante, desde la distancia al volante o la altura del mismo. Ten en cuenta que no debemos tener el asiento muy atrás del pilar B, esto es el pilar entre las dos puertas, ya que nos bloqueará el campo de visión si giramos la cabeza.
– Consciencia. Parece una tontería pero hay que ser conscientes del tamaño que tiene nuestro vehículo. A mayor tamaño, mayores serán los ángulos muertos lo que se traduce también en mayor ocupación del carril en un adelantamiento. ¿Qué queremos decirte con esto? Que respetes las distancias de seguridad y tengas en cuenta que a la hora de adelantar, puede haber otro coche “escondido” en un ángulo muerto.
– Cuidado con la velocidad, sobre todo en carreteras rápidas donde pueden adelantarte a elevada velocidad. Evalúa y ten presente la velocidad del resto de los coches.
Esperamos que con estos consejos los ángulos muertos a la hora de conducir no te supongan un problema y recuerda: la seguridad es lo primero.