Olor a nuevo, motor impecable, rodamiento perfecto, todo es maravilloso cuando estrenas coche; hasta que llega el fatídico día en el que metes la pata y comienzan las primeras averías del coche. Actualmente la mayoría de los daños en los vehículos pueden ser ocasionados por desgaste de las partes, por defecto de fabricación o por culpa del conductor.
Cuando un conductor mete la pata y avería su coche un mecánico se frota las manos, pues su vehículo pasará en el taller entre uno y diez días.
Veamos cuáles son las principales averías que podemos evitar:
1. Estar en babia en el momento de repostar. Si nos equivocamos y echamos gasolina a un coche diésel, hay que vaciar el depósito y limpiar los filtros. Esa es lo mejor que te puede pasar en esta situación, porque si arrancas el coche puede salirte bastante caro ya que puede afectar a otras partes del vehículo.
2. Pasar de las luces del salpicadero. Cuando una luz del tablero de instrumentos se ilumina es porque tu coche necesita tu ayuda, no pases de tu vehículo. Sobre todo haz caso a las luces rojas, que indican una detención inmediata.
3. Hacerse el loco con el mantenimiento del coche. Nunca debemos ignorar los intervalos de años o kilómetros que marca el fabricante de tu coche, ya que esto podría anular las garantías que posee tu vehículo o directamente que el daño sea más caro de solucionar. También es importante cambiar las piezas de desgaste antes de que empeoren.
4. Dejarse llevar por los acelerones. Conducir con suavidad, realizar cambios de marchas de manera eficiente y no someter a un estrés adicional a los componentes de tu coche; ya que estos pueden fallar.
5. Estar en la luna. Cuidado con viajar a la luna mientras estás cerrando el coche puedes olvidarte las llaves dentro y con las nuevas llaves electrónicas resulta muy complicado abrir el vehículo.
6. Olvidarte de lo que pone el manual. Usar el punto muerto en cajas automáticas cuando el coche está parado durante poco tiempo puede provocar averías en la transmisión. Esto no ocurre con todos los vehículos, ya que existen diferentes tipos de cambio, así que lo más recomendable es leer bien el manual.