¿Sabías que los coches antiguos ya incluían gran cantidad de accesorios? Y es que en aquella época los coches ya buscaban dar todo el confort a su usuario. Muchos de estos accesorios hoy nos perecerán singulares y rudimentarios pero en su época eran pura modernidad. Lo que está claro es que seguro que te sorprenderán. He aquí los más llamativos.
Minibar en la guantera: En los años 50 muchos fabricantes de coches, decidieron que beber y conducir podrían llegar a ser dos actividades complementarias, algo que hoy en día nos escandalizaría. Un ejemplo es el Cadillac Eldorado Brougham (1957) que contaba con un mini-bar en la guantera como accesorio estándar.
Faros automáticos: Muchos coches antiguos ya contaban con luces y faros. Desde mediados de la década de 1960, empezaron a contar con ellos los modelos de lujo americanos de marcas como Lincoln, Cadillac o Imperial. Sus funciones eran básicas, encendían las luces en la oscuridad, aunque las versiones de alta gama como Sentinel Crepúsculo de General Motors tenían un temporizador que les permitía dejar las luces encendidas después de salir del coche y las apagaba de forma automática para que el conductor se moviese tranquilo en la oscuridad.
Gongs de metal: En los años 30, muchos modelos de coches incorporaban una especie de campanilla de metal o gong que los conductores ponían debajo de su barbilla. Su misión era sonar si el conductor bajaba la cabeza para dormirse. Una medida, creemos, un tanto incómoda.
Tocadiscos: En los años 50 ya algunos coches incorporaban la posibilidad de escuchar música durante el viaje. Chyrsler, incluía un tocadiscos versión mini, en el hueco donde ahora se ubican las radios. Esta medida no fue muy exitosa entre otras cosas, porque la aguja del tocadiscos no estaba preparada para lidiar con los saltos de las carreteras, ni tampoco era fácil hacerla funcionar en movimiento.
Cinturones de seguridad automáticos: Hasta los años 80, las autoridades no se preocuparon del uso obligatorio de este sistema, clave en la seguridad. Durante los años 60 y 70, muchos fabricantes de coches incluían estos sistemas como extra o una opción de lujo. A finales de la década de los 70, algunos fabricantes de coches, especialmente en EEUU, diseñaron un tipo de cinturones de seguridad, anclados a las puertas o a los propios asientos, de manera que era necesario deslizarse por debajo de las propias correas para poder hacer uso del mismo.
Asientos para perros: Durante los años 50, muchas compañías de coches, crearon una especie de asiento para perros situado junto a las puertas de atrás. Así, los perros podían permanecer sentados dentro del coche y mientras tanto, sacar la cabeza para que le entrara aire fresco a través de un pequeño agujero. Otros fabricantes diseñaron una especie de jaula para perros en el propio chasis del vehículo, con una especie de aletas que podían ser enrolladas para proteger al animal.
Pegatinas para los buenos o malos conductores: En los años 30, eran los propios conductores los que colocaban unas inusuales pegatinas de calaveras en sus vehículos para advertir a los demás conductores de su manera de conducir. Las pegatinas incluían el lema Traffic Ley Violator (infractores del tráfico).
Televisores: En 1970, el diseñador del Espada S2, quiso llamar la atención del público con un coche novedoso, incluyendo un minibar y una televisión en sus modelos.
Botiquín de primeros auxilios: En los años 90, muchos coches incluían un botiquín de primeros auxilios. Esta medida no fue especialmente exitosa y hoy está prácticamente en desuso. Aunque sin duda, puede venir bien para nuestra seguridad y ocupa poco espacio.
Humidificador de puros: El Rolls-Royce Phantom transformó su guantera añadiendo un humidificador para puros. Para los no fumadores, ofrecían un kit de bolígrafos, hechos a medida.