Revisar el nivel de líquido refrigerante y rellenarlo en caso de que no alcance el mínimo recomendado es vital para el cuidado de nuestro coche. Pero, con qué rellenar el depósito, ¿agua o anticongelante? Ante la disparidad de opiniones, explicamos para qué sirve cada uno de los líquidos del sistema de refrigeración de nuestro vehículo.
El sistema de refrigeración de un coche está formado por el líquido refrigerante/ anticongelante, el radiador, el termocontacto, el termostato, el depósito de expansión y la bomba de agua.
Para que todo funcione correctamente, es necesario saber que la responsabilidad del líquido refrigerante es absorber el calor que genera el motor y controlar la estabilidad de la temperatura en el sistema con ayuda del radiador.
Mientras circulamos, el motor de nuestro vehículo alcanza con facilidad los 90ºC. A partir de esta temperatura, se acciona el termostato pone en marcha el sistema de refrigeración para evitar sobrepasar los 90 grados y evitar averías que pueden llegar a dañar el motor del coche. El líquido a utilizar en este circuito influye en la eficacia con la que va a mantener la temperatura del sistema mecánico del vehículo.
Agua: Puedes utilizarla si es destilada. El agua del grifo puede dañar el motor de tu coche por su nivel de cal, por ejemplo. En cualquier caso, si decides utilizar agua destilada en el sistema de refrigeración de tu coche debes saber que las posibilidades de que las cañerías, mangueras y cámaras del motor pueden corroerse a largo plazo por el oxígeno que contiene el agua destilada.
Líquido refrigerante / anticongelante: El líquido refrigerante está preparado para bajar la temperatura al motor del vehículo. Aunque actualmente también tenemos a nuestra disposición los líquidos anticongelantes, que suelen cumplir la doble función de refrigerar el sistema mecánico y, como su punto de congelación es más bajo, también ayudará al encendido durante el arranque.
Los colores del anticongelante son cuestión de gustos. El líquido anticongelante está formado por una parte de glicol-etilenico, que es la sustancia que evita la congelación y mantiene la temperatura del motor estable gracias a que su punto de ebullición es superior al del agua. Que el líquido sea de colores sirve para detectar sus fugas con más facilidad. Ahora, el agente activo es el mismo ya sea el líquido final de color verde, rosa o amarillo.
Utilizar agua o líquido anticongelante en el día a día del coche no afecta a su rendimiento. Sin embargo, a largo plazo, si utilizamos agua destilada es más probable que se produzca corrosión en las mangueras del sistema de refrigeración por ello, es interesante pensar en utilizar el líquido preparado específicamente para mantener la temperatura del motor. Por otra parte, si vives en un lugar donde la oscilación térmica es amplia, altas temperaturas durante el día y bajas durante la noche o si utilizas el coche en entornos donde se alcanzan temperaturas bajo cero con facilidad es importante utilizar líquido anticongelante para mantener en correcto estado el sistema mecánico de tu coche.