El mantenimiento del coche de forma constante se hace indispensable si no queremos tener que llevarlo al taller en un futuro y es que si queremos evitar averías inesperadas, nada mejor que seguir el manual del fabricante y realizar las revisiones pertinentes.
Has de ser consciente de que cualquier elemento es susceptible de rotura por rozamiento, vibraciones, degradación o movimiento. También pueden sufrir desgaste por uso como es el caso de los neumáticos, discos, filtros, frenos, embrague, amortiguadores o correas.
A continuación te damos una serie de puntos que has de revisar:
– Escobillas limpiaparabrisas sobre todo en zonas con lluvia constante. Revisa que su barrido sea correcto y que evacúen el agua, granizo o nieve. Si no están cumpliendo bien con su función, se hará necesario cambiarlas por ejemplo tras el verano.
– El filtro de aceite tiene como misión retener las partículas metálicas que aparecen con el desgaste normal del motor y ya que los cambios de aceite se han ido dilatando con la mejoría de la composición de los mismos, es conveniente reponer el filtro cada vez que se cambia el lubricante.
– Triángulo de seguridad:
- Amortiguadores. Proporcionan confort en la conducción y ayudan a controlar el vehículo en situaciones de riesgo. Su correcto funcionamiento depende del estado de la carretera, carga del vehículo, kilometraje…, lo recomendable es realizar revisiones periódicas cada 20.000 Km.
- Neumáticos. Se hace indispensable mantener los índices de presión aconsejados por el fabricante y ser consciente del desgaste habitual que sufren por la manera de conducir del usuario, climatología, pavimento sobre el que se conduce…; es aconsejable revisarlos una vez al año.
- Frenos. Su desgaste está muy influenciado por la conducción del usuario y también depende del medio habitual por el que ruede el vehículo. Cuanto más desgaste, más metros se necesitarán para frenar. Por ello es muy importante revisarlos una vez al año.
– Iluminación. Nunca olvides que los faros de tu coche no solo te permiten ver sino también ser visto. Comprueba mensualmente el buen funcionamiento de los mismos y mantén su superficie exterior libre de toda suciedad.
– Tubo de escape. No solo tiene como función reducir el ruido de los gases al salir del motor sino también el cuidado del medio ambiente. Su deterioro es inevitable pero si notas fugas o corrosiones, cuidado. Acude a tu taller porque los tubos defectuosos pueden aumentar el peligro de incendio del vehículo.
– Para evitar el desgaste de las piezas del motor, los lubricantes desempeñan un papel fundamental. Su vida útil es elevada, en torno a los 30.000 Km para algunos modelos nuevos aunque dilatar más de 15.000 Km el cambio de lubricantes puede hacer que el motor sufra.
– Para sincronizar los cuatro tiempos del motor se encarga la correa de distribución. Es muy importante seguir los consejos del fabricante del vehículo ya que su rotura puede ocasionar una avería grave (y cara) en el motor.