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Redacción
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Aunque nadie está exento de tener un percance en carretera, existe una clase de conductores con un mayor riesgo de sufrir accidentes. Según las compañías de seguros, estos suelen ser varones menores de 25 años o mayores de 65. Pero, ¿por qué estos perfiles son más propensos a verse involucrados en un siniestro?
La inexperiencia, un factor clave
Los conductores jóvenes encabezan la cuota de siniestralidad en España y Europa. Según el Observatorio Europeo de Seguridad Vial, la tasa de mortalidad de los conductores noveles dobla en número a la de los más veteranos. En estos casos, la inexperiencia, el exceso de velocidad, las distracciones o el estrés son las causas más frecuentes de accidentes con personas jóvenes implicadas. Sumado a esto, debemos añadir, en muchos casos, el consumo de sustancias y la conducción en horario nocturno como factores desencadenantes.
A mayor edad, menos reflejos
Las personas mayores de 65 años conforman el otro grupo de conductores con mayor riesgo de sufrir accidentes, el cual aumenta conforme van cumpliendo años. A pesar de su experiencia en la conducción en la mayoría de los casos, la edad supone un factor clave en la siniestralidad. A mayor longevidad mayor deterioro físico y cognitivo, lo que implica una pérdida de visión, reflejos o agudeza auditiva.
Además, los años también implican un agravante en cuanto a las lesiones sufridas en un accidente. La tasa de mortalidad entre conductores mayores de 75 años quintuplica a la de los conductores en general, y duplican la tasa de lesiones.
Como has podido comprobar la inexperiencia de los más jóvenes y la edad de los más veteranos juegan un papel fundamental a la hora de sufrir un siniestro en carretera. Ante ambas situaciones es fundamental extremar las precauciones y adaptar la conducción a las características de cada persona e incluso al tipo de vehículo.
