Con la creciente e imparable subida de los combustibles, muchos consumidores buscan las gasolineras más baratas con las que poder ahorrar hasta 20 céntimos por litro. Pero, ¿son estas gasolineras peligrosas para el motor del coche? Aquí te contamos algunos detalles según las opiniones de varios expertos.
Características de las gasolineras baratas
Repostando en este tipo de establecimiento podríamos gastar hasta 180 euros menos al año en combustible. Este ahorro aunque generoso ¿nos compensa? Los expertos aseguran que todo carburante vendido en España cumple unas especificaciones mínimas por ley, que se publican en el BOE. Entonces, ¿cuál es la diferencia? La clave está en que las compañías estandarizadas ofrecen mayor calidad, ya que añaden a los carburantes componentes especiales, más aditivos y mayor octanaje. La teoría afirma que estos ingredientes reducen la suciedad, mejoran la lubricidad, aumentan la eficiencia y alargan la vida del motor.
¿Son entonces dañinas las gasolineras baratas para nuestro vehículo?
Una gasolinera puede ser más económica que otra y no ser por ello mala para nuestro coche, ya que los carburantes que comercializa han sido testados. Puede ocurrir que un consumo prolongado en este tipo de establecimientos aumente las averías en un coche, porque estos productos se queman peor y generan mucha suciedad en los catalizadores y filtros de partículas. Sin embargo, esta afirmación no se puede generalizar ya que estas averías ocurren también repostando en gasolineras más caras.
Según otros expertos, lo más importante es quizá el mantenimiento de la gasolinera, que influye en la calidad del producto. Es imprescindible que los carburantes estén correctamente almacenados en tanques controlados y limpios.
Una vez analizada toda esta información la respuesta sigue siendo un poco difusa. Mientras las gasolineras baratas ofrecen un producto que cumple sus funciones a la perfección, las grandes petroleras venden el mismo producto pero con “mayor calidad” y “mejor atención”, por lo que su precio es más elevado. Las empresas baratas rentabilizan por los litros vendidos ya que el margen es reducido. Las grandes empresas venden menos pero con mayor precio. La conclusión es difícil pero ahora te toca a ti decidir qué tipo de combustible prefieres para tu vehículo y a qué precio.