Tenemos que remontarnos a 1988 para situar la llegada de la Voyager a Europa, por lo que se convirtió en uno de los primeros monovolúmenes introducidos en el mercado. Presentado por el fabricante de automóviles estadounidense Chrysler, desde el año 2001 el nombre de Voyager se asocia con los mercados de venta fuera de Estados Unidos.
Desde 1990 y hasta el 2008 se han lanzado hasta cinco versiones diferentes, cada una de ellas dividida también en dos subversiones: la Voyager, o versión normal, y la Grand Voyager, versión grande de más de cinco metros de longitud.
En total hay tres versiones del Chrysler Voyager según el tipo de coche:
- Chrysler Voyager 2.5 CRD: tracción delantera, cambio manual, máximo de siete plazas, 4,8 metros de longitud, 1,9 de ancho y 1,7 de alto, motor diésel de 2.499 cc y 143 CV y un consumo de 7,7 litros a los 100 kilómetros
- Chrysler Voyager 2.8 CRD: tracción delantera, cambio automático, máximo de siete plazas, 4,8 metros de longitud, 1,9 de ancho y 1,7 de alto, motor diésel de 2.766 cc y 150 CV y un consumo de 8,4 litros a los 100 kilómetros
- Chrysler Voyager 2.4 SE: tracción delantera, cambio manual, máximo de siete plazas, 4,8 metros de longitud, 1,9 de ancho y 1,7 de alto, motor de gasolina de 2.429 cc y 147 CV y consumo de 9,9 litros a los 100 kilómetros
El Grand Voyager destaca por ser el modelo que ha cambiado la clásica colocación de los asientos 2-3-2 en un 2-2-3. El Chrysler Grand Voyager es un monovolumen de siete plazas disponible con motor diésel de 163 CV y una caja de cambios automática de seis velocidades. Los asientos de la segunda y tercera fila se pueden ocultar en unos huecos bajo el suelo sin necesidad de desmontarlos.
Podemos considerar el Chrysler Voyager como uno de los vehículos más conocidos del sector automovilístico, desde su lanzamiento, en el mes de noviembre de 1983, se han vendido más de 12 millones de unidades.