El nuevo Seat Ibiza demuestra, una vez más, los altos estándares a los que se atiene en materia de seguridad y ha logrado alcanzar la máxima puntuación en los test de seguridad de Euro NCAP, las cinco estrellas. Probablemente en ello influya que la fabricación es española, en la nueva plataforma MQB A0 de Martorell. Con esta puntuación se une a los otros dos pilares de la marca, el Ateca y el León, en conseguirla.
Una de las mayores puntuaciones que logró fue el 95% en la categoría de protección de ocupantes adultos, sin duda debido a los sistemas de ayuda a la conducción que incorpora como el asistente de frenada en ciudad o los nuevos cinturones de seguridad en todos los asientos (delanteros y traseros) con pretensión y limitación de carga. También ha destacado en la protección de los pasajeros menores y en la de los peatones. En lo primero influyen, de nuevo, los cinturones de los que hablábamos, ya que están pensados también para niños, porque la pretensión reduce la holgura entre éste y el torso y la pelvis en el momento del impacto.
En 1997 se comenzaron a realizar las pruebas de choque de Euro NCAP, que pretendían evaluar el comportamiento de los vehículos nuevos en materia de seguridad y establecer un baremo y ranking para que los usuarios pudieran saber cómo se comportaba su automóvil en esa materia. Desde ese año hasta hoy se han ido añadiendo diferentes pruebas conforme van aumentando y evolucionando los distintos sistemas de seguridad, pero siempre manteniendo unos estándares de calidad que son incluso mayores de lo que establece la legislación europea. Entre los miembros de la organización se encuentran representantes de los ministerios de transporte europeo, asociaciones de automovilistas, aseguradoras y organizaciones de consumidores.