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Cuando acabas de sacarte el carné de conducir y de comprar coche, tu cartera ya no está para muchos gastos, sin embargo, este es el momento de contratar un seguro y tienes todas las papeletas para que sea de los más caros ¡horror! Pero tranquilo, ¡te ayudamos!

Los jóvenes de entre 18 y 25 años son considerados “grupo de riesgo” por las aseguradoras, ya que piensan que es más probable que, debido a su inexperiencia, sufran un accidente. El ser novato en el mundo de la conducción hará que nos cobren una cuota más alta por nuestro seguro, pero… ¿podemos evitarlo? Pues, aunque lo más probable es que pagues más que alguien que lleva media vida conduciendo, sí que tenemos unos truquitos para reducir al máximo tu cuota.

Comenzamos por la norma número uno de todo gran ahorrador: comparar. Pide precios en distintas aseguradoras y consulta las tarifas, a veces, hay mucha diferencia de precio entre unas y otras, inviertes un poco de tiempo, pero ¡sales ganando!

Antes de comprar coche

A veces pensamos que el seguro es lo que viene después del coche, pero no necesariamente tiene que ser así, fijarnos en ciertas características del vehículo puede hacer que la cuota del seguro sea más barata. Por ejemplo, cuanta más potencia tenga más pagarás, sin embargo, si el coche incluye algún sistema antirrobo o sistema de seguridad adicional el importe del pago puede ser menor. Además, sus kilómetros o que lo guardes en garaje son pequeños detalles que te permiten arañar unos euros que notarás a final de año.

¡Ya tengo el coche!

Si ya tienes el coche es momento de escoger qué tipo de póliza te compensa más, si tu coche es nuevo no lo pienses, a todo riesgo, pero si ya no es nuevo es muy probable que te compense otra opción. Por ejemplo, las pólizas a terceros ampliadas te permiten escoger qué te gustaría cubrir además de los daños a terceros y según la antigüedad del coche y el precio puedes conseguir una póliza a tu medida. También es posible jugar con las franquicias, un seguro con franquicia es bastante más barato que si no la lleva, según el número de siniestros que tengas puede compensarte ponerle franquicia a tu póliza y ahorrar en la cuota.

Finalmente, debes saber que si ninguna aseguradora está dispuesta a hacerte una póliza, como no te puedes quedar sin seguro, el Consorcio de Compensación de Seguros se encargará de ello, así que no te preocupes por eso. Ya has visto que tengas los años que tengas es posible tener seguro a buen precio.