Al presenciar un siniestro en carretera la mayoría de los conductores no saben cómo deben actuar realmente. De esta forma, no solo no benefician a los accidentados, sino que también pueden poner en peligro su propia vida. Es por esta razón que, si alguna vez te encuentras ante un accidente en carretera, debes tener presentes los siguientes pasos para estar preparado para la situación.
Primer paso: Proteger
La primera medida que debes tomar al presenciar un siniestro es la de proteger. Fundamental, estaciona tu coche de la mejor forma posible para que no suponga un estorbo y ponte el chaleco reflectante antes de bajar.
Si el vehículo accidentado está en llamas o transporta mercancías peligrosas no te acerques a él. Antes de nada señaliza cuanto antes la zona con los triángulos de emergencia y activa las luces de emergencia o posición de tu coche. Una vez hecho esto, procura permanecer alejado de la calzada.
Segundo paso: Avisar
El segundo de los pasos a seguir si presencias un accidente en carretera es avisar a los servicios de emergencia. Debes marcar el 112 y proporcionar todos los datos que puedas, como la dirección o el punto de la vía en el que te encuentras para facilitar la tarea de ubicación. También debes informar, de ser posible, el número de heridos, y las condiciones en las que estos se encuentran, atrapados, con hemorragias, etc.
Tercer paso: Socorrer
Finalmente, una vez hayas llevado a cabo los dos pasos anteriores debes procedes a socorrer a las víctimas del accidente. Esta labor es la más delicada, ya que los heridos no se deben mover, ni, en caso de ser motorista, retirar el casco en ningún momento. En consecuencia, no debes trasladar a las víctimas por tu cuenta, y tampoco proporcionarles comida ni bebida. Lo que debes hacer es permanecer a su lado en todo momento tratando de tranquilizarlos y, solo en caso de tener conocimiento sobre cómo aplicarlos, realizar tareas de primeros auxilios.
No lo olvides, siguiendo estos tres pasos fundamentales puedes resultar de gran ayuda durante un accidente en carretera. Y recuerda, para proteger a los demás primero debes protegerte a ti mismo.