El invierno ha venido para quedarse y este año, si cabe, aún más duro y largo que en épocas anteriores. Nieve, hielo y abundantes lluvias son el pan de cada día de la mayoría de españoles. Pero, ahora más que nunca, debes proteger tu vehículo de las inclemencias meteorológicas para evitar averías y riesgos en la carretera. Si vives en zonas más cálidas puede que te suene a chino lo de la sal en la carretera, pero es una técnica que se lleva utilizando hace muchos años para evitar que los coches se deslicen cuando hay hielo en el pavimento. A pesar de ser muy recomendable, en este artículo te contamos sus contraindicaciones y te damos algún consejo para proteger tu vehículo. También puede ser buen momento para pasarte por tu Concesionario Galicia y comprar un coche nuevo o un coche seminuevo con ruedas de invierno.
¿Cómo perjudica la sal a mi vehículo?
Una exposición prolongada del coche a los residuos de sal que se quedan en la carretera podría provocar la corrosión y oxidación de partes como la carrocería, los frenos o las llantas. Pero no solo las zonas de la parte inferior del automóvil, también podrían estropearse las puertas, los guardabarros, el capó o el maletero.
Normalmente los coches nuevos salen del Concesionario con una capa impermeabilizante para proteger los bajos, pero esta se va perdiendo con el paso del tiempo. Si pasamos a diario por un pavimento con sal y no tomamos ninguna precaución los metales de nuestro coche podrían volverse quebradizos y crearse un picado o agujero.
¿Cómo prevenir la corrosión por la sal?
Lo más importante es evitar que la sal repose sobre la carrocería durante mucho tiempo. La recomendación más sencilla es tratar de pasar una manguera a presión sobre tu coche siempre que se exponga a la sal. Puedes encontrar mangueras a presión en casi todas las gasolineras. Lava bien la carrocería, los pasos de las ruedas y los bajos.
Otro consejo es pasar una buena capa de cera a tu coche para prepararlo para el invierno. Parecerá recién pintado y lo protegerás de las inclemencias invernales. Tampoco estaría mal acudir a tu taller de confianza para realizar una revisión general y sellar el tren de rodaje.
Si no quieres pasar por tu Concesionario Galicia antes de lo esperado, recuerda cuidar tu vehículo y protegerlo de la sal con estos pequeños consejos. Tomar medidas a tiempo evitará averías más graves en el futuro.