Cuando vemos una mancha de líquido bajo el coche, tendemos a pensar en una fuga de aceite o combustible, sin embargo, son muchos los líquidos que forman parte del buen funcionamiento de nuestros vehículos. Ningún coche debería perder ningún tipo de líquido, ni los más antiguos ni los coche de ocasión o los coches seminuevos, por ello es importante saber identificar esas manchas para solucionar la avería cuanto antes. A continuación te ayudamos a detectar los líquidos más comunes que te puedes encontrar debajo de tu coche.
Agua, la única mancha que no debe preocuparnos
De todas las posibles manchas que podemos encontrarnos bajo el coche, la de agua es la única que no es señal de avería. El agua procede de la condensación del sistema de climatización que se produce cuando estamos parados con el aire acondicionado en funcionamiento. Pasado un rato desde que el coche ha perdido agua, la mancha se seca y desaparece.
Las 5 manchas más comunes
Son muchos los líquidos que conviven en nuestro coche pero que no sabemos reconocer. Es importante saber identificarlos ya que algunos, en su caso más grave, pueden provocar un daño irreparable o muy costoso en el vehículo.
Fuga de aceite de motor: Las pérdidas de aceite pueden ser leves, un par de gotas a la semana, o graves, que se forme un charco cada vez que el coche esté parado. Estas manchas se pueden identificar por su textura viscosa y resbaladiza, o por su color, si el coche es de gasolina será de tonos dorados y si es de diésel será negra.
Líquido anticongelante: Es muy fácil de reconocer por su olor dulce y el color llamativo, normalmente rosa o amarillo. El refrigerante regula la temperatura del motor y evita el calentamiento de este de manera que evita que pueda gripar el motor.
Manchas de combustible: Su olor característico hace que sean fáciles de identificar. En el caso de la gasolina se evapora con rapidez por lo que no deja grandes manchas. El gasóleo por su parte deja restos de color negro o marrón bajo el coche. Este último a veces puede ser confundido con restos de aceite, pero el gasóleo es más claro y líquido.
Líquido de frenos y de dirección: En algunos coches se comparte el fluido de dirección asistida hidráulica y del sistema hidráulico de frenos. Tienen una tonalidad dorada o marrón similar al líquido de aceite.
Fuga de valvulina: Es el líquido que se encarga de mantener lubricada la caja de cambios. Su color es parecido al del aceite de motor, dorado, pero su textura es más viscosa. En caso de que el vehículo sea de cambio automático, el líquido será de color rojo. Estas fugas pueden provocar sobrecalentamiento del cambio de marchas.
Estas son las cinco manchas de líquidos más comunes que podemos encontrar debajo de nuestro vehículo. Todas ellas, excepto la de agua, requiere una vista al taller, especialmente, en caso de tener que pasar la ITV próximamente ya que todas las pérdidas de fluidos son faltas graves.