La ola de frío que nos ha acompañado en las últimas semanas no solo puede ser peligrosa para nuestra seguridad vial, por hielo o nieve en la carretera, también puede acarrear problemas en las piezas de nuestro vehículo. Cuando las condiciones climáticas vuelven a la normalidad, o mejoran, es necesario revisar los elementos más importantes del automóvil o acudir a un taller mecánico donde realicen una puesta a punto de nuestro coche. En este artículo te contamos cómo afectan las bajas temperaturas a tus neumáticos. Puede que si tu coche tiene más de 15 años no sobreviva a este invierno, ¿por qué no comprar un vehículo de ocasión en plena forma?
Importancia de unos neumáticos en buen estado
Como hemos mencionado en numerosas ocasiones, las ruedas de tu coche son uno de los elementos más importantes y que te aporta mayor seguridad en la carretera. Soportan el peso del vehículo, absorben los impactos, trasmiten la tracción, mantienen la dirección y son el punto de contacto con el asfalto. Revisarlas con frecuencia es muy importante para evitar accidentes o fallos mecánicos complicados.
Cuando las temperaturas son inferiores a los diez grados, la elasticidad del caucho se reduce y puede deteriorarse, disminuyendo su flexibilidad y su capacidad de adherencia. Además, debes tener en cuenta que con el frío las ruedas pierden presión. Por ello, es muy importante que en invierno vigiles la presión de tus neumáticos para evitar accidentes o pinchazos.
¿Cómo revisar mis neumáticos en invierno?
Durante todo el año debes cuidar el estado de tus neumáticos pero aún más en invierno. Si te has quedado atrapado en la carretera por una ola de frío o tu coche ha estado parado durante mucho tiempo a la intemperie, antes de comenzar la marcha echa un ojo a tus ruedas. Es muy importante que no haya grietas, bultos, reventones o elementos incrustados. También es recomendable que mantengas la presión marcada por el fabricante, incluso un poco por encima en invierno por lo que comentábamos antes. Lo ideal es que la profundidad del dibujo sea de 3 milímetros, para asegurar la distancia de frenado y el agarre a la carretera al circular por terrenos en mal estado. Ten en cuenta que las ruedas no pueden estar desgastadas de forma desigual. Esto puede deberse a desgastes en las piezas de suspensión o a una mala alineación. Si notas un desgaste desigual y vibraciones cuando conduces, acude a tu taller mecánico de confianza. Esta simple acción puede prevenir peligros cuando las condiciones climatológicas son adversas.S i vas a conducir por zonas nevadas no te olvides de colocar cadenas o poner unos neumáticos de invierno.
Aquí te dejamos algunas recomendaciones para que tú y tu coche podáis sobrevivir las gélidas temperaturas que nos acompañan.