Para poder cumplir los objetivos del Acuerdo de París, el Gobierno se ha puesto en marcha con la Ley del Cambio Climático y la Transición energética y da un plazo de uno a dos años a las gasolineras para instalar puntos de recarga para vehículos eléctricos. Las electrolineras han llegado para quedarse.
Como ya sabemos, la Ley del Cambio Climático pretende según el Ministerio de Transición ecológica: ” facilitar el cumplimiento de España con sus compromisos internacionales y europeos en materia de cambio climático y de energía…” Pero ¿cómo afectará esto a las gasolineras españolas? Pues bien, que dejarán de serlo para convertirse en electrolineras o se exponen a multas de hasta 30 millones de euros.
Plazos por volumen de negocio
Dependiendo del volumen de ventas del año 2017, el Gobierno establece dos plazos para prestar servicio a los coches eléctricos:
- Gasolineras con ventas superiores a 10 millones de litros
Tienen nueve meses para presentar el proyecto de instalación del punto de recarga.
Tienen doce meses para instalarlo y que sea operativo.
- Gasolineras con ventas entre los 5 y los 10 millones de litros
Tienen 15 meses para presentar el proyecto de instalación del punto de recarga.
Mantienen los doce meses para implementarlo.
Existen más de 11.500 gasolineras y estaciones de servicio en España lideradas en general por las grandes compañías con Repsol a la cabeza, pero existe una gran proliferación de puntos de venta al por menor y gasolineras low cost que deberán adaptarse igualmente a la normativa.
El Gobierno planea ofrecer ayudas
El ejecutivo de Pedro Sánchez establece en el borrador de la Ley que los puntos de recarga eléctricos deben ser semirápidos. ¿Qué quiere decir esto?
Existen tres tipos de puntos de recarga dependiendo de la velocidad y la potencia. Los puntos de recarga estándar como los de tu casa o la oficina son de 3,7 Kw. Si encuentras un “enchufe” para tu coche en un parking público, estás en un punto de carga estándar rápida a 7,4 Kw.
Sin embargo y para garantizar la carga sin provocar los colapsos en las estaciones, el Gobierno sólo aceptará puntos de recarga semirápida en las gasolineras. Los puntos de recarga semirápida son de 22 Kw y el coste de la instalación de cada uno ronda entre 30.000 y 50.000 euros.
Es por eso, que el Gobierno planea la concesión de ayudas para la instalación de los puntos de recarga en estos establecimientos, pero aún no se ha pronunciado sobre la forma ni las cuantías.
Tampoco se conocen las condiciones, pero podrían llegar antes a las gasolineras con menor volumen de litros de venta y a las provincias o regiones que no tengan estaciones de servicio de estas características.
Para empezar, el ejecutivo obliga a estos establecimientos a que las gasolineras con mayor volumen de ventas (hasta el 10% del total) presenten un proyecto conjunto. Tendrán 15 meses para presentarlo y después de ser aprobado tienen 12 meses para llevarlo a cabo.
Comienza por lo tanto la carrera para la electrificación y despetrolización del sector automovilístico en España. En 2050 el objetivo es eliminar de las carreteras españolas los coches de gasolina, coches diésel y los coches híbridos.