Más de 20.000 personas mueren cada año a consecuencia de los niveles de contaminación que existen en nuestro país. ¿La fuente de estas partículas? Los vehículos con motor de combustión. Sin embargo, es un problema que no sólo afecta a nuestro país, sino que por el contrario tiene unas dimensiones globales. Pero, ¿cómo reacciona cada país ante este problema? ¿Cuándo se espera que se implanten nuevos vehículos híbridos o eléctricos para paliar estos daños al medio ambiente?
Suecia y Noruega han establecido como fechas límite a la producción de coches con motor de combustión los años 2030 y 2025 respectivamente. Por otro lado, una de las empresas nórdicas del automovilismo más importantes en el mundo, Volvo, ha declarado que a partir de 2019 la totalidad de sus vehículos serán eléctricos parcial o totalmente. Lo cierto es que los países norteños, se han convertido en el referente a nivel mundial, con ejemplos como Noruega en donde 4 de cada 10 conductores ya utilizan coches eléctricos.
Francia y Reino Unido son dos de los focos europeos más potentes de contaminación atmosférica. El gobierno de ambos países estableció un límite de 23 años para decir adiós para siempre a los coches de gasolina. Lo que ocurre hoy en día, es que las cuotas de mercado de los vehículos eléctricos está en un 4%. Esto quiere decir que si hoy se venden 100 coches, únicamente 4 de ellos son eléctricos o híbridos. Frente a estas deprimentes cifras, resulta difícil legislar o prohibir el uso de automóviles que funcionen con combustibles.
China es el principal mercado de coches a nivel mundial, por lo que las leyes que implante este país servirán como un mensaje para las empresas fabricantes de coches. En este sentido resulta tremendamente positivo descubrir que el gobierno chino está muy comprometido con incentivar la venta y uso de coches híbridos y eléctricos. De hecho, para el año 2030 se espera que haya más de 80 millones de puntos de carga.
En nuestro país se han adoptado diferentes medidas en las ciudades más grandes. Por ejemplo Manuela Carmena, ha lanzado el Plan A de calidad del aire en Madrid, en el que se contempla una serie de medidas. Por ejemplo, para 2018 se van a implantar límites de velocidad máxima en las vías de acceso entre la M-40 y la M-30. Para 2025, se prevé una restricción a la circulación para todos aquellos vehículos con motor de combustión y permitiendo únicamente la presencia de aquellos menos contaminantes. Por su parte, Barcelona, también adoptará una serie de medidas hacia 2020 como por ejemplo la prohibición de acceso a los coches en los días con mayores índices de contaminación. Desde una perspectiva nacional, parece ser que el gobierno actuará según las directrices externas de Bruselas.