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Redacción
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Ford renueva este año 2017 una de las piezas más importantes de su gama: el Ford Fiesta. Este modelo, que salió al mercado en el 1976, presume de ser el utilitario escogido por 17 millones de usuarios a la hora de comprar coche durante estos últimos 40 años. La que es ya la octava generación del Fiesta llega con un tamaño superior al de su predecesor, mayor tecnología y un enfoque más lujoso.
Su nueva imagen exterior es la primera de las novedades: hereda rasgos estéticos e introduce otros nuevos como las ópticas delanteras menos rasgadas y un frontal de formas más redondeadas. La gran parrilla continúa siendo una marca de personalidad mientras que la zona de los antinieblas y las entradas de aire inferiores ha sido renovada para lograr un conjunto armonioso. En la parte posterior nos encontramos con un nuevo parachoques y un portón trasero distinto, junto a las luces traseras horizontales. La línea del techo será más alta.
En el interior crece el espacio especialmente en las plazas posteriores, proporcionando mayor confort para los pasajeros. También añade un nuevo diseño del habitáculo con un salpicadero renovado que incorpora una pantalla central en color de 8 pulgadas. Finalmente, varían otros elementos como el volante o los paneles de las puertas y la calidad interior percibida es mayor.
La carga tecnológica que incorpora el nuevo Fiesta lo posiciona como uno de los líderes en tecnología del segmento de manera que todos los sistemas de entretenimiento y conectividad giran alrededor del nuevo sistema SYNC3. La seguridad es otro de sus puntos fuertes. Hasta 15 sistemas de asistencia a la conducción entre los que destacan el aparcamiento asistido, el indicador de ángulo muerto o el asistente de cambio involuntario de carril. Todos ellos articulados en torno a 2 cámaras, 3 radares y 12 sensores de ultrasonido para monitorizar el coche en sus 360º y controlar lo que sucede en la carretera hasta 130 metros por delante.
En cuanto a los motores, el nuevo Fiesta viene con dos bloques de gasolina: el 1.0 EcoBoost de 100, 125 y 140 CV y caja de cambios de seis velocidades; y el tricilíndrico 1.1 de 70 u 85 CV y cinco marchas. También se podrá optar por la versión diésel, que monta el motor 1.5 TDCi. de 82 y 120 CV de potencia.
El nuevo modelo, que estará en los concesionarios a mediados del 2017, pretende alcanzar todos los nichos de mercado. Para ello, el Ford Fiesta se estrena en cuatro versiones diferentes: Active, con una estética SUV; ST Line, el más deportivo; Titanium, moderno y avanzado; y Vignale, el más exclusivo y lujoso.
