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El Lexus LC es toda una hazaña de la marca, su diseño espectacular y su gran potencia lo hacen, a simple vista, un vehículo distinto y llamativo, que atrae desde el primer momento. Una vez dentro, su tecnología y deportividad invitan a la diversión. Se trata, en conjunto, de un coche muy completo.

El nacimiento del Lexus LC comenzaba con su prototipo, el LF-LC, que sorprendió sobre todo por su revolucionaria estética. Tras la presentación, el reto era llevarlo del papel y de los salones a la realidad sin perder la esencia que había enamorado a los espectadores. Este Lexus es, hoy en día, uno de los coches más similares a su prototipo de los que han existido nunca.

Desde la marca, nos cuentan que el proceso ha sido realmente complejo, por ejemplo, el techo bajo no hacía cómodo el habitáculo y una de las tareas más complicadas fue combinar ambos. Por otro lado, encajar las 21 pulgadas de los neumáticos con la altura del capó fue también una odisea para Lexus. La marca nos explica que el trabajo conjunto de las más de cuatro mil personas que lo diseñaron, crearon y montaron fue lo que hizo realidad este modelo.

El diseño interior, por el contrario, sí se aleja del prototipo, el resultado obtenido en los salones indicaba que aunque era espectacular, la gente no lo veía como un coche de carretera. Así, desde la marca, optaron por mezclar la originalidad del diseño con la comodidad que buscan todos los conductores.

Finalmente, en cuanto a la propulsión, el Lexus LC cuenta con un V8 de 5.0 litros que pasa de 0 a 100 en 4,5 segundos y logra una potencia de 467 CV. Cuenta también con una versión híbrida, denominada LC 500h que no difiere en la estética, pero que posee un motor V6 de 3.5 litros con 299 Cv de potencia y otro eléctrico de 60 CV, combinando ambos suma una potencia de 359 CV y consigue pasar de 0 a 100 en menos de 5 segundos, por lo que no tiene nada que envidiarle al modelo tradicional.

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