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Puede que pensemos que conducimos sin cometer errores y equivocaciones. Pero en algunas ocasiones, por despiste o desconocimiento, nos olvidamos de algunos hábitos básicos que no deberíamos obviar y que nos ayudarán a conducir de forma mucho más segura.  Quizás pienses que estas tácticas resultan muy pesadas pero se trata de convertirlas en un hábito que muy pronto se transformará en gestos automáticos a los que no tendrás que prestarles atención.

1. ¿Te sientas adecuadamente? Procura asegurar que el asiento no está ni muy cerca ni muy lejos. Lo correcto es buscar la distancia exacta que te permita pisar los pedales flexionando ligeramente la rodilla y sin necesidad de que tengas que mover la cadera para acceder a ellos. Para el respaldo puedes tomar como referencia que la muñeca de cualquiera de los brazos debe colocarse de forma natural sobre la parte superior del volante. Y la altura de la banqueta ha de ser lo más baja posible sin comprometer evidentemente la visión.
2. La mala costumbre de cruzar las manos. Es importante colocarlas en un ángulo de diez y diez según la esfera de un reloj. Puede que te parezca que al cruzar las manos lo tienes todo bajo control pero pierdes movilidad y comprometes la seguridad.
3. Es fácil conducir en línea recta pero con las curvas es más problemático. Acostúmbrate a mirar lejos y anticiparte a los movimientos ya que es importante que llegues al punto de máximo giro con el coche completamente bajo control. Aprende a frenar en la distancia adecuada, girar con una velocidad correcta y buscar la línea más abierta posible dentro del trazado del carril.
4. Anticipación. Grábatelo muy bien porque ha de ser una norma básica. Mantente alerta en la carretera, con la atención y concentración fijas en ella con el fin de anticiparte a los posibles cambios que pueda sufrir.
5. Aprende a mirar lejos. No puedes estar pendiente solo de lo que tienes delante del capó ya que perderás mucho la perspectiva. Escanea el recorrido de forma constante y dibuja mentalmente una línea que ha de seguir el coche con efectividad.

Y ahora ¡a ponerlo en práctica!