Cuando somos niños vemos las cosas de un modo diferente. Quien pasó su infancia en los ochenta, vivió la llegada de los modelos deportivos a las carreteras. Si hasta entonces se buscaba un vehículo básico, para moverse, ahora se comenzaba a soñar con coches más potentes.
Ford Capri – En Gran Bretaña era un modelo de culto. De hecho, su tercera generación tuvo el dudoso “honor”de ser el vehículo más robado en las islas británicas durante la década de los 80.
Ferrari Testarossa – Nació para corregir los puntos débiles de su antecesor, el Ferrari 512 BB. Sobre todo en cuanto a confort al volante de este superdeportivo. Muchas de las soluciones que aporta proceden de los modelos de competición.
Opel Kadett GSi – El Opel por excelencia. El primer modelo comenzó a producirse en 1936 y fue el modelo más vendido de la firma alemana hasta que dejaron de fabricarlo en 1991. En 1985 fue el Coche del Año en Europa.
Opel Manta A GT/E – La versión deportiva del Opel Ascona se fabricó con la intención de alcanzar el éxito del Ford Capri. Alcanzaba los 188 km/h de velocidad punta.
Opel Calibra – Es el sucesor del Opel Manta. Se comercializó en las marcas Opel, Chevrolet, Holden y Vauxhall Motors. Compartía plataforma con la primera generación del Vectra y estaba disponible con tracción delantera o a las cuatro ruedas.
Peugeot 205 GTI – El modelo deportivo del 205 salió al mercado en 1984, su potencia era escasa frente al Golf o al Renault 5. Lo solucionaron modificando su motor para que alcanzase los 125 caballos. En 1985 fue coche del año en España.
Renault Fuego GTX – “Confort que no quema”. Así tituló Motor 16 la crónica de su prueba en la época. Según la publicación mostraba un buen comportamiento, consumo razonable, motor ruidoso y dirección sensible.
Renault 5 GT Turbo – Durante los 12 años que estuvo en producción se fabricaron cerca de tres millones y medio de ejemplares. Las versiones más deportivas del Supercinco contaban con motores de 120 CV.
Volkswagen Golf GTI – Las versiones GTI del Volkswagen Golf permitieron ampliar su potencia. Fue de los primeros vehículos pequeños con inyección de gasolina y creó un concepto nuevo que copiarían todas las marcas: los compactos deportivos.
Porsche 911 Carrera – Cuando presentaron el primer modelo en el Salón del Automóvil de Fráncfort, en 1963, se llamaba Porsche 901. Cambiaron el nombre a 911 por una demanda de Peugeot. La propulsión trasera y la carrocería coupé son comunes a todas las versiones de este biplaza.