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Parece que fue ayer, pero ya hace 30 años que Audi puso en marcha el nuevo sistema de Ingolstadt en sus instalaciones. Una plataforma de carga que destacó en su momento, por ser la única existente en todo el sector automovilístico europeo. La idea vino de manos de un trabajador del departamento de logística de la marca. Desde este momento, más de ocho millones de coches han salido de la planta de Ingolstadt por ferrocarril a través de esta plataforma. De esta forma el sistema ganaba rapidez y eficiencia, revolucionando la carga de los coches de la industria automovilística. En su momento esta tecnología se convertiría en pionera, ya que era la más moderna que existía en Europa en la década de los 80. Incluso hoy sigue siendo considerada vanguardista.

Hasta este momento, los trabajadores de la firma habían cargado los vehículos en los vagones del ferrocarril mediante un método de alineamiento de la carga, lo que quiere decir que debían llevar los coches de manera individual en trenes de unos 800 metros de largo. Gracias al sistema ideado por uno de los empleados de la marca, la carga se podía realizar de forma simultánea en dos vagones de doble piso. Cuando un vagón se llena y se une al tren, un robot trae el siguiente vagón desde la pista lateral hasta la plataforma para ser cargado.

Pero además, el sistema ha revolucionado la forma de trabajo de los empleados de la sección de logística de Audi, reduciendo los tiempos de conducción y regreso de forma considerable. Y es que gracias a este sistema, todo el trabajo se realiza bajo techo y los conductores pueden trabajar de una manera más cómoda independientemente de las condiciones meteorológicas. En la actualidad la operación de carga puede llevarse a cabo en tan sólo seis minutos, montando hasta doce coches en un vagón de dos niveles. Con lo cual el trabajo no es solamente más rápido, sino que además se hace más ergonómico y seguro.

En la actualidad, el equipo de Audi carga alrededor de 1.800 coches cada día en unos 180 vagones de ferrocarril en la planta de ingolstadt. Lo cual representa aproximadamente un 70% del total de la producción de la planta. Algo que es posible gracias a la idea que hace 30 años tuvo este trabajador de Audi.